lunes, 17 de noviembre de 2014

La rentabilidad de premeditar

El ser humano y su idiosincrasia
de creerse superior por ser un ser racional
es de las creencias mas absurdas
implementadas en nuestra sociedad actual, 
somos un animal más, 
quizás un tanto más desarrollado, 
pero un animal más
al fin y al cabo. 

Nos movemos por instinto
y confiamos más en nuestros sentidos
que en cualquier otro tipo
de percepción ajeno a nuestro cuerpo
como si la verdadera lógica fuera esa, 
pensamos, premeditamos, 
creamos estrategias
y hacemos planes
y más planes. 

Creamos todo ese mundo racional
como si realmente fuera a servirnos para algo, 
como si todos esos planes se cumplieran en orden
o todo lo premeditado nos ayudara a realmente
tener mayor control emocional
pero no funciona así, 
y aún no podemos aceptarlo
seguimos buscando explicaciones
en máquinas costosas, 
en nuevas inversiones
y dejamos nuestro lado humano, nuestro lado animal
para convertirnos en productos
que precisan del éxito impuesto
para ser rentables en el mercado, 
para convertirnos en un curriculum vacío.

Y seguimos empecinados en creerlo, 
en creer que el mundo se va a salvar
con una nueva máquina, 
con un nuevo dispositivo
cuando estamos olvidando lo que realmente nos mantiene vivos:
el amor a la vida, el mirarnos a los ojos, 
el sentido de pertenencia
y la necesidad de arriesgarlo todo, 
siguiendo el propio instinto.

No hay comentarios:

Publicar un comentario