lunes, 27 de octubre de 2014

Paralelismo

Me miro en el espejo intentando no destruirme,
que la ira no se ocupe
de asesinar cada una de mis cicatrices.
Lo medito, lo pienso, me observo,
y me pierdo entre reflexiones absurdas
que me siguen manteniendo hace meses
en el mismo lugar.
Al parecer ya no hay fuego a mi alrededor,
pero ni siquiera mi profunda versión mitológica
se apreciaba al verse al espejo
seguro también esa parte de mí
se dejaba manipular por mi inhóspito cerebro
para sentirse menos de lo que debía ser.
Me siento en una dimensión diferente
absorta en una burbuja protectora
que me aleja de esta dimensión,
dejandome en profundo contacto
con la única persona que puede atacarme
hasta dejarme sin aliento;
con la única persona que sabe como hacerme sentir
insignificante ante la presencia de una hormiga:
Yo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario