botellas en el suelo,
ceniceros llenos,
camino hasta el living,
y caliento agua para un mate,
un mate que nunca había tomado tanto,
pero es que ya no se que hacer conmigo
y voy probando un poco de todo para llenar el silencio
y el vacío se apodera de la habitación
y no hay música que haga un poco de ruido.
Esta hoja en blanco me está enloqueciendo,
mi inconsciente me detesta
y te proyecta en mis sueños ambiciosos
y despierto llena de sensaciones y de comparaciones,
y no hay chispas en otros besos
y no hay noche que no sienta ese vacío de extrañarte antes de dormir.
Estoy harta, me abruma la idea de tomar malas decisiones,
y no hacerme cargo de ninguna,
como si la vida ahora pasara por otro lado,
me fui al extremo de los riesgos como si nada importara.
No hay comentarios:
Publicar un comentario